Entender todo lo que ocurre relacionado a nuestras finanzas personales es fundamental en el mundo actual. En este artículo te contamos los puntos principales de la educación financiera.
La educación financiera se ha vuelto un tema recurrente en nuestras vidas. Todo el mundo coincide en que es importante tenerla, pero pocos son capaces de conocerla en profundidad. La educación financiera golpea a nuestras puertas y nos invita a involucrarnos en algo a lo cual no podemos escapar que es el manejo de nuestro dinero y nuestras finanzas personales. La diferencia entre una persona que sabe manejarse y otra que no puede ser abismal. ¿Te animas a empezar?
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La educación financiera es el acceso al conocimiento y la información precisa y adecuada para tomar las decisiones correctas a la hora de manejar nuestras finanzas personales. Decisiones sobre nuestros ingresos tomamos todo el tiempo, ineludiblemente. Lo importante es por lo tanto tomarlas con la mayor comprensión e información posible.
Cuando hablamos de educación financiera estamos hablando también de ingresos y gastos, es decir cómo llega el dinero a nosotros y cómo se va de nuestras manos. Lograr que los primeros superen a los segundos es sin dudas la misión principal.
En el medio de esos dos conceptos podemos decir que se halla el ahorro y la inversión. El ahorro es la capacidad de inmovilizar parte de nuestros ingresos, evitando que se vayan de nuestras manos en forma de gastos. Si tenemos entonces capacidad de ahorro podemos pensar en la posibilidad de realizar inversiones, o sea hacer algo con ese dinero de modo tal que se multiplique, o que al menos no pierda su valor.
La alta inflación, eterno flagelo de la Argentina, atenta todo el tiempo contra nuestro poder adquisitivo, o sea nuestra capacidad de comprar cosas. Con el mismo dinero compro menos artículos este mes que el mes pasado. Si no hacemos nada al respecto, nuestros ingresos se van deteriorando y nuestra capacidad de ahorro se minimiza volviéndonos cada vez más pobres.
La educación financiera, por lo tanto, busca llamarnos la atención sobre todos estos temas, de modo tal que administremos de forma eficiente nuestros ingresos, que minimicemos nuestros gastos y que generemos así capacidad de ahorro con la que poder invertir. Una vez que tenemos dinero disponible, las opciones para invertir son muchas gracias a los avances tecnológicos y el desarrollo de las plataformas de homebanking de los bancos. Desde allí puedo, no solo ver el dinero que tengo en una cuenta bancaria, sino que puedo realizar casi cualquier tipo de inversión con un par de clicks: plazo fijo, fondos comunes de inversión, compra de dólares, acciones, etc. Sobre esto te podemos contar más en nuestro curso introductorio de home banking e inversiones.
Por todo ello la educación financiera es fundamental. Y cuando decimos educación financiera no estamos hablando de convertirse en expertos de las finanzas, si no de saber lo mínimo indispensable para manejar nuestro dinero, sea poco o mucho. ¿Estas listo para empezar?