Buenas Inversiones

La era de los gastos innecesarios

Cómo descubrir y erradicar los gastos hormiga, esas pequeñas salidas de dinero que pesan cada fin de mes

Vivimos la era de los gastos innecesarios. El consumismo y las facilidades de pago mediante medios electrónicos nos llevan a menudo a suscribirnos a algún tipo de servicio que muy probablemente no necesitamos. El aparentar y el no querer quedar fuera de las grandes tendencias suele ser el factor crucial a la hora de tomar estas desafortunadas decisiones económicas. ¿Necesito realmente todo lo que contrato? Veamos los casos más frecuentes.

Netflix

El gigante de los streaming es el servicio con más proyección en los últimos tiempos. El público ha abrazado esta forma de consumir audiovisuales, y con un gran soporte de marketing y producciones “tanque” exclusivas ha logrado posicionarse fuertemente en el mercado. El costo de este servicio es extremadamente barato para la cantidad y calidad de contenidos que ofrece: una cuenta estándar en Argentina hoy ronda los $270. Sin embargo, ¿cuántas veces al mes lo usas? Muchas personas contratan el servicio y no miran más que una película al mes. En esos casos, se está pagando por un contenido de miles de horas de material audiovisual para, con suerte, utilizar dos. Estamos allí ante un gasto innecesario.

Spotify

De forma similar a lo ocurrido con los servicios de streaming audiovisuales, Spotify es un servicio con una galería inmensa de música online. El valor del servicio, teniendo en cuenta la potencialidad de lo que se ofrece, es extremadamente barato: $99 al mes. Pero la cuenta hay que hacerla no con la potencial música a escuchar si no con la música que efectivamente escuchamos. ¿Lo usamos a diario o terminamos recurriendo a You Tube o a música guardada en el móvil? Este análisis es fundamental para detectar la utilidad del servicio. Es importante, además, contemplar el gasto de datos del plan de telefonía móvil que este servicio implica si lo usamos en situaciones en las que no contamos con wi-fi.

Seguro contra robo en cajero

Este servicio es algo que muchas personas tienen y desconocen. Muchas veces los bancos agregan esta prestación a nuestra cuenta sin previa consulta. Esto implica el seguro ante un robo ocurrido en los cajeros de la compañía. Sin embargo, hay quienes prescinden del cajero ya que utilizan débito o se manejan con efectivo proveniente de otros negocios. El costo del seguro suele ser ínfimo, pero si no utilizamos el cajero más que una vez por mes estamos claramente ante un servicio innecesario.

Plan de telefónica celular

Todos tenemos celular, absolutamente todos. No es la idea aquí hacerte desistir de ello. Sin embargo, muchos de nosotros no estamos enterados de las prestaciones que tiene nuestro plan. Acostumbrado a los aumentos constantes, omitimos chequear si el plan que tenemos es el mismo que en un comienzo contratamos y si ese plan es el ideal para cubrir nuestras necesidades. Podemos estar pagando datos que no usamos o mensajes que no enviamos. Una buena idea para determinar si estamos pagando de más es activar los controladores de consumo de datos que los teléfonos móviles actuales tienen. Eso además, por supuesto, de habilitar el wi-fi y conectarnos a cuanta red esté a nuestro alcance en nuestra vida cotidiana.

Donativos

Esto puede resultar frívolo o poco solidario, pero en más de una ocasión tenemos cargado en nuestro débito de la tarjeta de crédito alguna donación mensual a alguna entidad u organización benéfica a la cual no deseamos aportar de forma regular todos los meses. Es un gesto enorme hacer donaciones por causas nobles, pero no siempre nuestra economía doméstica nos lo permite y se transforma en un gasto hormiga que complica las finanzas.

Servicio de TV por cable

Este es un ítem difícil de asimilar como gasto innecesario. Estamos absolutamente habituados a tener TV por cable en nuestros hogares. Años de hacer uso y abuso de este servicio nos hizo entenderlo como un servicio imprescindible como el agua, la luz o el gas. Sin embargo, ante el avance de los servicios de streaming como Netflix, la tv por cable está quedando lentamente relegada. La pregunta esencial a hacernos es cuanto miramos de TV y qué canales utilizamos. En la mayoría de los casos notaremos que nuestras horas de TV son escasas y los canales usados son unos pocos. Este servicio es claramente reemplazable por la TDA, Televisión Digital Abierta, un sistema gratuito de canales de aire que, dependiendo la zona del país, puede tener hasta 30 canales en su grilla, incluyendo los tradicionales de aire y varias cadenas de noticias.

SUBE

En el área de Capital Federal y Gran Buenos Aires, el uso de la tarjeta SUBE es prácticamente fundamental. Moverse en auto, sobre todo en el centro, es una mala idea los días de semana por lo que el transporte público es una muy buena opción, y en la capital funciona aceptablemente. Pero, puede que nos tornemos adictos a la SUBE y la usemos hasta para ir al supermercado que tenemos a 5 cuadras. El boleto mínimo hoy está a $20 por lo que evitar cinco viajes innecesarios por semana redunda en un ahorro de $400 mensuales. Caminar y andar en las bicicletas gratuitas del gobierno de la ciudad puede ser una muy buena alternativa, no solo recomendable para el bolsillo sino también para la salud.