Buenas Inversiones

¿Qué son y cómo operan los Fondos Comunes de Inversión?

Lo que hay que saber de los FCI, la creciente alternativa de inversión que ofrece opciones para todos los gustos

Las alternativas de inversión que ofrecen los bancos van hoy en día bastante más allá que los plazos fijos. Desde la mayoría de los homebanking se, puede ejemplo, comprar acciones de empresas y participar en la bolsa. Sin embargo, ese mundo resulta demasiado desconocido para los inversores estándar que solo buscan dar un pasito más en sus conocimientos financieros.

Para ellos, la opción ideal son sin dudas los Fondos Comunes de Inversión. Los FCI  son grupos de inversores que aportan su dinero para que profesionales los administren con algún criterio u objetivo de inversión determinado. Estos profesionales cobran una comisión mínima que se deduce de las ganancias generadas.

Los fondos se dividen en fracciones llamadas cuotapartes. Esas cuotapartes tienen un valor que se actualiza a diario. Al ingresar al fondo, uno compra la cantidad de cuotapartes equivalente al capital que quiere invertir, y al salir uno vende sus cuotapartes y obtiene el equivalente en pesos según la cotización del día.

Por ejemplo, si yo quiero invertir $1000 en un fondo en el que hoy las cuotapartes valen $5, voy a obtener 200 cuotapartes. Transcurrido un tiempo quiero sacar mi dinero, por lo que se van a multiplicar esas 200 cuotapartes por el valor del día, que en este ejemplo es $8, por lo que voy a haber obtenido $1600.

Los fondos permiten a inversores sin mayores conocimientos acceder entonces a instrumentos de inversión sofisticados como pueden ser bonos o acciones, mediante la administración de profesionales que, además, se encargan de diversificar el capital de modo tal de minimizar los riesgos. El inversor, por su parte,  puede ingresar y salir del fondo cuando lo desee, sin costo alguno, lo cual otorga enorme liquidez a este tipo de inversión, a diferencia de los plazos fijos en los que se inmoviliza el dinero por un tiempo determinado.

Hay diferentes fondos de inversión según el tipo de inversión que se desee. Hay fondos conservadores, que suelen tener un rendimiento relativamente bajo (similar a los plazos fijos) y son previsibles. Tenemos fondos intermedios, que arriesgan un poco más pudiendo obtener rendimientos mayores. Y hay fondos que invierten en acciones y suelen tener alta volatilidad y riesgo, pudiendo obtener grandes ganancias como pérdidas.

Cada banco, mediante su homebanking, suele ofrecer una cartera de fondos con fondos que se pueden ubicar en las tres categorías expuestas. Cada fondo tiene su descripción en la que se explica las inversiones que se realizan con el dinero de los participantes y los niveles de riesgo.

Algunos bancos exigen abrir una cuenta comitente, lo cual es una cuenta específica en la que se “guardan” las cuotapartes. Este trámite se hace también por home banking y no lleva más que algunos minutos.  El monto mínimo de inversión suele variar entre $500 y $1000, dependiendo el fondo. Es el momento de intentarlo, ¡hay un fondo de inversión esperándote!

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Todo sobre los fondos que operan en Argentina lo podes encontrar en la Cámara Argentina de Fondos de Inversión.